Preguntarse cuánto invertir en una página web no es lo mismo que preguntar: ¿Cuánto cuesta una página web? Esta parece la pregunta del millón. ¡Pero… atención! Una pregunta así es una pregunta de doble filo. Cuidado con el filo que elegimos…
1,- Imaginaros que una empresa de marketing online presupuesta el tiempo de realización de una página web.
2.- Ahora imaginaros otra empresa de marketing online que presupuesta el tiempo de realización de la misma página web, pero además de la realización, presupuesta también:
- un análisis del sector en internet
- un análisis de la competencia en internet
- un análisis de la usabilidad
- un análisis de la confianza
- un análisis de optimización web para el posicionamiento en Google y el SEO
- la realización y programación más adecuada según las características de todo lo analizado.
Supongo que hay una gran diferencia entre los presupuestos de estas dos opciones.
- ¿Cuál de las dos opciones es invertir dinero?
- ¿Cuál de las dos opciones es tirarlo?
- ¿Elegirías el presupuesto más barato?
Si yo tengo pensado realizar una web para mi negocio, en vez de pedir un presupuesto para realización y diseño, y preguntar cuánto cuesta una página web, primero me haría la siguiente pregunta.
[Tweet «¿Cuánto puede mi negocio invertir en una web? «]
¿Cuál puede ser la mejor opción web si mi empresa puede invertir x cantidad de euros?
Mejor haz siempre preguntas de un solo filo.